En el crisol de la contienda presidencial, Jeannette Jara, abanderada del Partido Comunista, irrumpe con un llamado a la cordura, respondiendo al fuego cruzado de sus adversarios, José Antonio Kast y Evelyn Matthei, en el polémico caso ProCultura. La exministra del Trabajo, con voz firme, acusa a los líderes opositores de orquestar una sinfonía de dudas y polémicas, instándolos a permitir que la justicia siga su curso, sin interferencias ni juicios prematuros.
La controversia se avivó tras las declaraciones de Matthei, quien en un video publicado en X, describió ProCultura como «uno de los casos más escandalosos, más vergonzosos» de la historia reciente, apuntando directamente a «el corazón de La Moneda». Previamente, Kast había exigido al Presidente Boric la entrega de sus celulares y su disposición a colaborar con la investigación.
Jara, lejos de amilanarse, contraataca, denunciando una estrategia para «inflar la idea de que hay financiamiento irregular de la política». En su perspectiva, las declaraciones de Kast y Matthei son parte de un plan para erosionar la confianza pública en la política. «Instalan dudas, siembran polémicas y finalmente desprestigian a la política», afirma, defendiendo la integridad de Boric, a quien respalda incondicionalmente.
Finalmente, Jara exigió a sus rivales políticos «un poquito más de prudencia, dejar que las investigaciones se lleven adelante».