En una noche donde la nostalgia se entrelazó con la solidaridad, el Teatro Caupolicán se erigió como un santuario para honrar la memoria del carismático Felipe Camiroaga, en un evento benéfico destinado a fortalecer los programas sociales de su fundación homónima. La velada del jueves vibró con música en vivo, destellos de humor y la emotiva proyección de material inédito del recordado animador chileno.
Un momento particularmente conmovedor llegó a través de la voz de la cantante mexicana Lucero, quien compartió un mensaje grabado que caló hondo en el sentir de los asistentes. La artista, cuyo romance con Camiroaga marcó la década de los noventa, expresó con una palpable nostalgia «Siempre tuve un cariño muy especial con mi queridísimo Felipe. Es un cariño que perduró a lo largo de los años y seguirá existiendo siempre». Lucero también resaltó la nobleza de la causa, enfatizando que “su amor por la naturaleza y los animales hoy se traduce en un espacio para apoyar de manera real”.
Su mensaje trascendió el mero saludo, apelando directamente a la generosidad del pueblo chileno. «Ustedes son muy generosos y saben conectarse con el corazón de los niños que tanto lo necesitan. Les pido que si pueden aportar, sería maravilloso, para que más niños sean beneficiados», añadió en su sentida intervención.
El vínculo afectivo entre Lucero y Felipe Camiroaga se forjó en 1992, cuando ambos compartieron roles como jurado en el Festival de Viña del Mar, un encuentro que sembró los primeros rumores de su relación.