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La comuna de San Fernando, en la región de O’Higgins, se vio sacudida por un escalofriante suceso un niño de tan solo 7 años fue brutalmente atacado por un perro de raza pitbull que deambulaba sin supervisión por la vía pública. El fatídico encuentro tuvo lugar en la intersección de las calles 1 y El Álamo, en la Villa Los Regidores, dejando al menor con heridas de gravedad tras ser salvajemente mordido en el rostro por el animal.
La urgencia del momento demandó el rápido traslado del niño al Hospital de San Fernando, pero la severidad de sus lesiones obligó a su derivación al Hospital Regional de Rancagua. El diagnóstico médico es sombrío: el menor enfrenta la angustiante posibilidad de perder la visión de su ojo izquierdo, mientras que su ojo derecho también presenta un compromiso delicado. A esto se suman importantes daños en su mejilla derecha y otras partes de su pequeño cuerpo, lesiones que demandan atención médica especializada y un seguimiento exhaustivo.
La noticia del ataque ha calado hondo en la comunidad, despertando una oleada de consternación y una exigencia por una mayor regulación y responsabilidad en la tenencia de perros considerados potencialmente peligrosos.
