La tranquilidad de la noche dominical en Chicureo se vio abruptamente interrumpida cuando un grupo de intrusos irrumpió en la residencia del alcalde de Ñuñoa, Sebastián Sichel. Los asaltantes, aprovechando la ausencia del edil, forzaron una ventana para acceder a la vivienda, ubicada en la comuna de Colina, y perpetraron un robo que dejó un millonario botín.
El inventario de lo sustraído revela un abanico de objetos de valor: dispositivos electrónicos, joyas y prendas de vestir, todo ello sumando un estimado de 15 millones de pesos. El golpe, que vulneró la seguridad del hogar del alcalde, ha generado una rápida respuesta de las autoridades.
La Fiscalía, ante la gravedad del hecho, ha encomendado la investigación al OS-9 de Carabineros, un equipo especializado que ya se encuentra desplegado en la búsqueda de los responsables. Las diligencias, que buscan reconstruir la secuencia del robo y dar con los autores, se desarrollan en un contexto donde la seguridad de las figuras públicas vuelve a ponerse en el centro del debate.